miércoles, 23 de julio de 2008

Otra vez al ruedo.

Comienza el ciclo, otra vez.

Noveno día del ciclo: Primer ecografía, de una serie de tantas. Se le llama seguimiento folicular. Se sigue la vida util del folículo, para ver como se "comporta".

En ese primer día, mi ovario derecho tenía dos folículos "preciosos" y el izquierdo dos folículos "no tan lindos" como los otros.

Hoy, en el día 12 del ciclo, se "destaca" uno de los folículos del ovario derecho, que creció de 14 a 21 milímetros. El otro folículo del mismo ovario quedó estancado. Lo mismo pasó con los folículos del ovario izquierdo. Según la ecografista, existe un "folículo dominante".

En fin... y pensar que una pensaba que la cosa era sencilla... mentira! es una complicación todo.

Para rematarla, fui a hacerme la Colposcopía y el PAP, y salí de ahi felíz. La ginecóloga que me hace esas torturas fue un encanto, y me despidió diciéndome: "Tenés un moco (cervical) precioso!!".

Salí contenta, pero al rato me di cuenta cómo me cambia la vida: Antes me alegraba por cualquier cosa "normal", ahora me alegro al ver como se comportan mis folículos, y por tener un "moco precioso".

En fin.. seguimos en camino.

domingo, 13 de julio de 2008

¿Porqué?... ¿Porqué a mi?

¿Porqué?

Eso es lo que me pregunto cada vez que llega mi período.
Todo comenzó hace dos años, cuando con mi pareja, decidimos que había llegado la hora de formar nuestra familia. Hacía 3 años que estabamos juntos.
Estamos bien establecidos en nuestros trabajos.
Teníamos nuestra propia casa, nuestro auto.
Habíamos viajado, habíamos aprendido a convivir (eso merecería ooootro blog), etc... etc... etc..
Eso parece frío, y lo es.
En realidad, sentíamos que teníamos todo, pero que no estabamos completos.
El hecho de tener un hijo nos hacía felíz.. sólo de pensarlo.
Lo imaginamos una mil veces.
Así que.. emprendimos la búsqueda!!
Debo aclarar, para que no crean que TODO es color de rosa, que desde un principio mi marido me aclaró que no estaba del todo dispuesto a realizar tratamientos de fertilización asistida, ni nada de esas cosas.
El es de las personas que cree que si los hijos vienen, es fantástico. Pero que si NO vienen.. por algo será.
Decidí restarle importancia a eso.. ya que pense: “no va a ser necesario!! un par de meses de práctia intensiva y ... listo!!”
Pasaron tres meses, seis meses, un año.. y NADA.
Cada vez que venía mi período, me sentía la más desgraciada.
Me preguntaba ¿porqué a mi?. Pero nunca obtuve alguna respuesta que me satisfaciera.
Navegaba mil horas por internet, entrando a cuanto sitio/foro/blog encontrara que hablase sobre el tema. Encontré mil mujeres que vivían lo mismo que yo. Y si bien eso no aliviaba mi dolor, sí hacía que no me sintiera única en este problema.
En fin, y para ahorrarles un tedioso relato que ustedes ya sabrán como es... llegamos al día de hoy.
Hace una semana visité a mi ginecólogo. Le expliqué con detalles todo el periplo por el que vengo pasando. Revisó todos mis análisis (PAP, colposcopias, análisis hormonales que me había hecho la endocrinóloga - sí si.. además tengo hipotirdoidismo – etc.. etc... etc..).
Me dijo que debía volver a hacerme en PAP y la colposcopía, mandó un espermograma para mi marido (problema!!!!) y me mandó a hacerme un “seguimiendo folicular”.
Y aquí me detengo:
PAP y Colposcopía: hace tres años tuve un carcinoma de cuello de útero. JAMAS me voy a olvidar cuando leí los resultados de mis estudios: “Carcinoma intraepitelial. SIL de alto grado”. Paffff!!! cachetazo, llantos, “me muero!!” pensé. Gracias a Dios, mi ginecólogo de entonces fue expeditivo, amoroso, comprensivo. Los resultados los tuve un viernes. El martes siguiente estaba en el quirófano, anestesia general, y a sacar el carcinoma del demonio. La operación fue breve. Al otro día me volví a casa, con un “cañito” que iba desde mi vagina hasta mi útero. Eso era para que al cicatrizar, no se cerrara el cuello del útero y tuvieran que volver a intervenirme.
Luego de eso, exámenes cada seis meses, y luego exámenes anuales. Hasta hoy todo ha salido a la perfección. Bah.. hasta el año pasado. Vamos a ver cómo me va el 23 de Julio.. día de mi próximo exámen.
Espermograma: Que momento!!! sabía que al llegar a casa y planteárselo a mi marido, la respuesta iba a ser un “Ni loco”! Suena egoísta, suena desinteresado, y quizás, lo que lo piensen, tengan razón. Luego del planteo, de la respuesta, vino mi llanto sobre la almohada, mi desazón, mi desesperanza. Me encomendé a mi Virgen Milagrosa. Desee tener cerca a mi mamá (que vive a 12000 kilómetros de aca).
Ese día cerré los ojos y dormí. No quería pensar más.. estaba agotada.
Seguimiento folicular: Es un procedimiento que consiste en realizar ecografías seriadas. La primera al noveno día del ciclo. Las restantes cada dos o tres días, dependiendo de la evolución del folículo. Fui hasta el lugar donde debía coordinarlo. Me respondieron que llamara una vez que tuviera mi primer día de menstruación, y que inmediatamente lo coordinabamos.
Bien – pensé – me tiene que venir entre hoy y mañana.. aunque mi ciclo es de 25 o 26 días.. y hoy estoy en el día 28.... ups!!!! NO ME HA VENIDO!!!!! asi que quizás... y sólo quizás.. no necesitemos de espermograma, ni de seguimiento folicular.. ni de nada... ESTOY EMBARAZADA!!!! estoy embarazada???.
Eso fue un miércoles. Pasó el jueves... pasó el viernes..
Les JURO que hasta sentía síntomas. Pasaba del llanto a la felicidad extrema. Estaba llena de energías. Dudaba.. porque en más de 5 años nunca tuve un retraso.. pero igual, quería mantenerme cauta.
Llegué al punto de acostarme boca abajo y SENTIR que había algo en mi vientre que me molestaba.
¿Como voy a hacer para dormir cómoda? Con lo mucho que me cuesta conciliar el sueño cuando no estoy boca abajo en la cama!!! - pensaba.. como loca.. - no importa, de alguna forma me las voy a arreglar.
Recuerdo en particular que me estaba bañando, y acariciando mi vientre (no piensen que estoy loca, por favor), pensaba para mis adentros: “Bebito mío, si estás ahí adentro, aguantá.. agarrate fuerte”.
Pensé nombres.. me gusta Lucía .. pero creo que el más adecuado es VICTORIA... hummm, me gusta Victoria!! Es un nombre que tiene fuerza, y que además, refleja perfectamente lo que sería tener un bebito.
A ver.. si es varón... Francisco!!! No, así se llama uno de mis primos. Estemm.. Federico!! Si, pega bastante con el apellido de mi marido y el mío..
Ya está! Estaba decidido.. si era varón: Federico, si era nena: Victoria! Seguro mi marido iba a estar de acuerdo.
Viernes a la noche: A eso de la 1 de la mañana, luego de haber hablando muchísimo del tema, decidimos ir a comprar un test de embarazo, de esos que se consiguen en la farmacia.
Y allá salimos! Como dos adolescentes loquitos...
Me entregaron el test, pagué y ya me iba.. hasta que el farmacéutido me dice: SUERTE! Cualquiera sea el resultado que esperes.
Casi me vuelvo a explicarle todo mi periplo, y hasta a contarle los nombres.. pero temí que llamara al loquero para que me encerraran.
Esa noche dormí entrecortado. Soñé, soñé con mi bebito.
Sábado: Me desperté tempranisimo, tomé el test y corrí al baño. Les JURO que casi no podía hacer pis. Hice el test, y esperé. Esos DOS minutos que demoré me parecieron horas. La primer rayita, la que confirma que el mismo fue bien hecho, demoró en aparecer.
Esta porquería vino mal!!! pense. Pero no, apareció la primer rayita. Y la segunda!!!!!!??? la que confirma que mi bebé está en camino? La que confirma todas mis sospechas!!!???
NADA.. no apareció NADA.
Volví a la cama y le comuniqué el resultado a mi marido. Pero bueno... “quizás los niveles de hormonas no están lo suficientemente concentradas” pensé.
A la tarde, voy al baño y .. manchita roja en el protector diario.
Fin de la historia.. no hay más ilusiones. Federico o Victoria no vienen este mes.
Tristeza infinita, rabia, llanto, malhumor, desazón.. y otra vez la misma pregunta: ¿Porqué?
Porqué a mi?